El gobierno chino acaba de anunciar una fuerte reducción de los aranceles a las importaciones de automóviles familiares o de pasajeros. De esta manera, la industria automotriz se convierte en la primera gran beneficiada de la tregua comercial acordada entre Estados Unidos y China. La administración Trump responde retirando – al menos por ahora – los proyectos de elevación de aranceles a un conjunto de productos importados de China. La reducción de los aranceles chinos a la industria automotriz ha sido uno de los principales objetivos de Estados Unidos. La inminencia de una guerra comercial entre las dos principales economías del mundo parece alejarse.
China reduce los aranceles a la industria automotriz
A partir del 1° de julio de 2018, los aranceles a la importación de automóviles familiares en China se reducirán del 25% al 15%. La actual tarifa a la industria automotriz importada ha estado vigente por más de una década en el gigante asiático. La medida fue comunicada por el ministro de finanzas del gobierno chino.
La disposición de reducción de aranceles informada por China se produce luego de las deliberaciones realizadas en Washington entre la delegación del país asiático y el gobierno norteamericano.
Cuando comiencen a regir los nuevos aranceles para la industria automotriz, los fabricantes de automóviles norteamericanos como Ford Motor Co. y Tesla Inc. se beneficiarán con la medida. Pero, también habrá repercusiones positivas para las empresas fabricantes de Europa y Asia.
Otro anuncio que beneficia a la industria automotriz es que los aranceles a las importaciones de autopartes se reducirán al 6%.
Para los analistas, la decisión del gobierno chino es positiva en todos los sentidos. Marca una intención de corregir los desequilibrios comerciales que están afectando a Estados Unidos. Sin embargo, la reducción de aranceles a la industria automotriz importada tiene más que ver con las intencionalidades que con lo práctico, en materia de desequilibrios. Los automóviles importados representan sólo el 4,2% del total de ventas en China.
Donald Trump hace su parte
En el mismo sentido de los anuncios realizados por el Ministerio de Finanzas de China, la Casa Blanca ha retirado sus proyectos de incremento de los aranceles a las importaciones provenientes de China. Sobre todo, porque recibió el compromiso por parte del gobierno de Xi Jinping de iniciar las conversaciones para prohibir que la empresa china ZTE Corp. Compre tecnología norteamericana.
La República Popular China recibe importaciones de vehículos por unos 51 mil millones de dólares anuales, según cifras correspondientes a 2017. De ese monto, 13,5 mil millones provienen de los Estados Unidos, que incluye a modelos que se fabrican en Estados Unidos por parte de industrias no norteamericanas.
China viene dando firmes pasos para beneficiar a la industria automotriz internacional. En abril, el gobierno de ese país anunció su plan para permitir que empresas extranjeras puedan poseer más del 50% de las empresas fabricantes de automóviles locales. Además, discute con Tesla una autorización para que los vehículos propulsados por energías nuevas renovables tengan sus propias plantas en China.
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