El Departamento de Comercio de Estados Unidos difundió, este viernes, los datos referidos al Producto Interno Bruto correspondiente al primer trimestre de 2018. El crecimiento del 2,3% anualizado, muestra una desaceleración en comparación los trimestres anteriores. El gasto de los consumidores se ha reducido y las inversiones en algunos rubros han seguido el mismo camino. Los analistas esperan que la reforma impositiva empiece a producir sus efectos en los períodos siguientes.

El Producto Interno Bruto crece menos de lo esperado

El informe sobre el comportamiento del Producto Interno Bruto en los Estados Unidos, que fue difundido este viernes por el Departamento de Comercio, ha sido como un baño de realidad en medio de lo que ha sido un tormentoso primer trimestre.

El PIB norteamericano creció un 2,3%, medido de forma anualizada, lo que significa un importante retroceso con respecto al 2,9% de crecimiento en el cuatro trimestre de 2017. Posiblemente, uno de los datos que más importe, de este informe, es que el gasto de los consumidores creció un 1,1%. Hay que remontarse a 2013 para encontrar un crecimiento en el gasto tan bajo.

Para David Sloan economista de Continuum Economics, el primer trimestre de cada año es, siempre débil, y se espera que el recorte de impuesto apuntale el gasto de los consumidores y las inversiones de las empresas. Aunque la preocupación sigue siendo el riesgo de una guerra comercial.

Lejos del objetivo Trump

El presidente Donald Trump había planteado que su objetivo era un crecimiento sostenido del 3% anual y eso parece estar lejos aún. Tampoco parece ayudar mucho la situación internacional, donde el crecimiento del Producto Interno Bruto en la Eurozona también sufrió una desaceleración por una menor actividad económica en los principales países.

Junto con una mengua en el gasto de los consumidores, el informe de Producto Interno Bruto da cuenta de una merma en el gasto de equipamiento comercial y en viviendas. Por su parte el gasto del gobierno pasó del 3% en el trimestre anterior, a un 1,2%.

La parte alentadora

De acuerdo con el informe del Departamento de Comercio, las presiones sobre los precios están mejorando y el indicador de precios del Producto Interno Bruto creció un 2% anualizado y si consideramos excluir los datos de mayor volatilidad – alimentos y energía – el crecimiento es del 2,5%.

Los ingresos anualizados, incluyendo salarios, creció un 3,4%. El mejor comportamiento desde 2015. Sin embargo, el gasto se retrajo, sobre todo fue notorio en la venta de automóviles, compra de indumentaria, alimentos y bebidas.

El Producto Interno Bruto de los Estados Unidos espera recibir los vientos de cola de los recortes impositivos y que la guerra de aranceles no continúe escalando.