No son buenos tiempos para la primera ministra británica, Theresa May. Luego de su derrota electoral, su sector dentro del Partido Conservador fue perdiendo mayoría. Ahora, un grupo de legisladores ultraconservadores y partidarios de un Brexit duro, han enviado una carta a la primera ministra “proponiendo” que adopte un enfoque más duro sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea. Para algunos analistas, la carta es una declaración de guerra y un chantaje a la política de Theresa May y pone en riesgo la estabilidad del gobierno del Reino Unido.

Los legisladores que presionan sobre Theresa May

62 legisladores conservadores, organizados en un grupo denominado European Research Group, y partidarios de un Brexit duro, han enviado una carta a la primera ministra británica, Theresa May, con un conjunto de “recomendaciones” para llevar adelante una salida rápida y sin condiciones de la Unión Europea.

Básicamente, los legisladores están conminando a que el gobierno del Reino Unido limite al máximo el período de transición y que adopte una política de independencia en la fijación de leyes post-brexit, sin la injerencia de la Unión Europea.

Si bien la carta habla de “nuestro continuo y sólido apoyo a la visión clara de una Gran Bretaña global y de libre comercio”, la misma ha sido considerada un desafío a la menguada autoridad política de Theresa May.

Un reclamo de Brexit duro que puede desestabilizar

Desde distintos sectores se acusa a Theresa May de carecer de un plan sólido de negociaciones con la Unión Europea. Esta debilidad del gobierno acaba de ser explotada por los partidarios del Brexit duro, agrupado en European Research Group.

Aunque los términos de la carta no han sido difundidos, se sabe que las fuertes exigencias del grupo de legisladores apuntan a que el Reino Unido logre, luego del divorcio, una “completa autonomía regulatoria” en materia de leyes. Este grupo de legisladores conservadores rechaza de plano la injerencia de los organismos de regulación de la UE, luego de producida la separación.

Los partidarios del Brexit duro rechazan, también, sin decirlo de manera explícita el período de transición en las relaciones comerciales. El grupo de toris sostiene que el Reino Unido debe contar con la capacidad de iniciar acuerdos comerciales bilaterales de inmediato, algo que Theresa May dice compartir, pero que se encuentra fuera de la agenda de negociaciones.

Jacob Rees-Mogg, líder del European Research Group, estuvo este martes en la sede del gobierno británico, pero no trascendieron detalles de los resultados de la reunión. Lo que sí está claro, es que la carta de los que reclaman un Brexit duro ha servido para minar aún más la autoridad política de Theresa May que, además, debe batallar contra el sector opuesto que le reclama un nuevo referéndum para revertir la decisión del Brexit.