Los mercados emergentes viven un jueves plagado de complicaciones. La divisa argentina volvió a depreciarse con fuerza y el banco central de ese país elevó la tasa de referencia 15 puntos porcentuales. La moneda turca también tuvo una jornada de fuerte caída. Los sacudones de la crisis se extendieron a Sudáfrica, Brasil y Rusia. Los inversores pierden la confianza en la economía de los países en desarrollo y retiran sus capitales.

Argentina y Turquía en el centro de la crisis de los mercados emergentes

Luego de que el miércoles la moneda argentina se depreciara un 8% con relación al dólar, la jornada del jueves estuvo marcada por una salida masiva de los inversores del peso. La divisa llegó a cotizar a 40 pesos por dólar.

El Banco Central de la República Argentina intentó frenar la escalada del dólar con un importante aumento en la tasa de referencia. Esta pasó del 45% al 60% anual, con una suba de 15 puntos porcentuales. Además, la entidad monetaria dispuso un aumento del 5% en el encaje de los bancos.

Al conocerse la medida el peso detuvo su caída. Pero, horas después retomó su camino bajista. El BCRA decidió no intervenir para frenar la devaluación, como lo ha hecho en otras oportunidades. Para un sector de los analistas, esto se debe a que las reservas del banco central se encuentran comprometidas en los pagos futuros. A pesar de ello y luego del mediodía, las autoridades monetarias debieron habilitar una nueva subasta. El BCRA puso a la venta 500 millones de dólares minutos antes del cierre de los mercados.

La complicada situación con la divisa argentina se extendió a otros mercados emergentes y a las monedas de países de Latinoamérica. De conjunto, las monedas de esos países alcanzaron su cotización más baja desde 1992.

Una crisis que se extiende

El efecto Argentina se hace sentir en otros mercados emergentes. En Brasil, integrante del BRICS, y la principal economía de Sudamérica, la devaluación de la moneda llegó al máximo nivel desde la crisis de 1994.

Turquía es otro de los mercados emergentes que atraviesa una situación similar a la de Argentina. La lira turca se devaluó este jueves un 4,78%. La caída de la moneda se vio amplificada ante los rumores de renuncia de uno de los responsables del banco central de ese país.

El descenso del conjunto de divisas de los países emergentes se extendió. La caída de las divisas alcanzó, además, al rand sudafricano y al peso chileno.

Los mercados emergentes, en esta jornada preocupante, extendieron la crisis de sus monedas a las acciones. La mayoría de los indicadores bursátiles de los países en desarrollo se vieron en baja en las pizarras. En el caso de Argentina, la caída del índice Merval fue del 10%.