Las declaraciones del presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, impactaron fuerte en los mercados en la jornada de hoy, cuando dijo que el organismo que preside no incluirá a Grecia en el programa de flexibilización cuantitativa hasta que no se produzca un acuerdo entre el país heleno y sus acreedores. Poco ayudan las declaraciones en momentos en que el rescate se encuentra empantanado. El ministro de finanzas de Grecia realizó ácidas reflexiones sobre las declaraciones de Mario Draghi.

Mario Draghi le dice no al QE para Grecia

La posición del presidente del BCE ha sido muy clara. Mario Draghi ha dicho que hasta que no haya un acuerdo completo y se puedan ver medidas que conviertan a la deuda en sostenible en el tiempo, Grecia no recibirá los favores de ser incorporada en el programa de flexibilización cuantitativa, por el cual el Banco Central viene comprando activos de los diferentes países.

La semana pasada los ministros de finanzas de la Eurozona fracasaron en llegar a un acuerdo para aliviar la deuda griega, habilitando nuevos programas de rescate para hacer frente a las obligaciones de julio. Los ministros han retrasado la finalización de la revisión.

La incorporación de Grecia al programa de compra de activos habilitaría a este país a ingresar al mercado global de bonos. El gobierno griego quiere mostrar esto como un símbolo de que la crisis ha sido superada, en medio de una campaña electoral.

¿Qué dicen en Grecia?

La posición expresada por Mario Draghi fue respondida en forma de súplica por el ministro de finanzas de Grecia, Euclid Tsakalotos, quien señaló que el pedido de Grecia para su inclusión en el programa es la posibilidad de acceder al mercado, y con mucha ironía dijo: “el BCE, como Nuestro Señor, trabaja de maneras misteriosas”.

Para los analistas, la inclusión de Grecia en el programa QE enviaría una señal de confianza y positiva hacia los inversores, a la vez que jugaría un importante rol en la política interna del país ya que el primer ministro Alexis Tsipras de cara a las elecciones de ese país ya que sería presentado como una victoria.

Una vez finalizado el proceso de revisión, el BCE hará su propio análisis y según Mario Draghi “Grecia deberá demostrar que la deuda es sostenible también en escenarios adversos”.

Las palabras de Mario Draghi han agregado una gran dosis de incertidumbre en los mercados europeos que esperan que, en la reunión de ministros de finanzas de la zona de euro, el próximo 15 de junio, se alcance un acuerdo de rescate para aliviar el peso de la deuda.

Los mercados han reaccionado con cautela y en baja ante los dichos del presidente del BCE que se suman a un posible adelanto electoral en Italia.