La Organización de Países Exportadores de Petróleo se encuentra abocada a crear las condiciones para duplicar su capacidad producción diaria de barriles, en espera de un crecimiento de la demanda. Para la OPEP, estas condiciones vienen acompañadas de algunos cambios en las condiciones productivas de varios de sus países miembros. Irak recupera su protagonismo en el mercado de países productores, luego de años de conflicto bélico. Irán, luego del levantamiento de sanciones por su política nuclear, comenzará a celebrar contratos con firmas extranjera. Los datos corresponden a la International Energy Agency.

La OPEP de cara al futuro

A pesar de las restricciones autoimpuestas por la OPEP, para el año 2017, reduciendo su producción diaria de barriles, con el fin de eliminar los excesos y evitar que los precios internacionales continúen en caída, la organización se prepara para generar las condiciones necesarias para aumentar la producción, acompañando un incremento de la demanda futura.

Según IEA, hasta el año 2022, la OPEP incrementará su capacidad de producción en 1,95 millones de barriles diarios. Con este nuevo panorama, la agencia internacional modifica sus previsiones, que el año pasado ubicaban el incremento de la producción en 800 mil barriles diarios.

En 2018, la demanda de producción diaria será de 33 millones de barriles, una cifra similar a producida antes del recorte, resuelto en noviembre de 2016 por la OPEP.

Irán e Irak recobran protagonismo

Para la International Energy Agency, para el año 2022, un tercio de las ganancias de la OPEP, se ubicarán en Irak. Este país, castigado por los conflictos bélicos, se mantendrá como el segundo productor de la organización internacional. Se cree que el país persa, incorporará 700 mil barriles diarios a su producción, previendo llegar a 5,4 millones de barriles diarios en 2022. El aumento de la producción viene de la mano del proyecto Majnoon, operado por Royal Dutch Shell Inc. en los campos del sur del país.

Por su parte, Irán estará en condiciones de aumentar su capacidad productiva en 400 mil barriles diarios si, finalmente, se levantan las sanciones impuestas. En 2022, Irán podría llegar a 4,15 millones de barriles diarios, gracias a los nuevos modelos de contratos, destinados a favorecer las inversiones extranjeras.

Recordemos que algunos analistas han coincidido que la OPEP deberá prorrogar sus recortes si se quiere evitar un nuevo derrumbe de los precios del crudo. Más allá de las condiciones para una mayor capacidad de producción, estará al debate si los mercados están en condiciones de absorber la producción. Estados Unidos ha comenzado a cubrir una parte de la demanda, por medio de la producción de Shell.

Tanto los países miembros de la OPEP, como aquellos importantes productores que se encuentran fuera de ella, deberán analizar si la demanda estará en condiciones de absorber los aumentos de la producción, a riesgo de provocar una nueva caída del precio internacional.