El miércoles, la calificadora de riesgo Moody’s Investors Service rebajó la calificación de la deuda china de Aa3 a A1. El gobierno de la República Popular China ha calificado de infundada la decisión, pero lo cierto que la medida adoptada por Moody’s entraña nuevo problemas para la economía china. Algunos sectores de los más afectados podrían ser las compañías aéreas y navieras, en momento en que la deuda corporativa alcanza a más del 150% del PBI chino. Ahora se especula si China correrá la misma suerte que los “tigres asiáticos” en 1997.

La deuda china puede entrar en un espiral

Con la nueva calificación del riesgo de la deuda china comienzan a ocurrir cosas bastante típicas de la economía tradicional. Por un lado, el endeudamiento internacional va a encarecerse por lo que las empresas localizadas en China deberán tomar deuda en los bancos nacionales chinos. Como es lógico, esto supondrá un incremento de los riesgos financieros de la banca china.

Desde que comenzó la crisis financiera mundial, en 2008, las empresas chinas han venido tomando deuda como forma de mantener el conjunto de la economía en funcionamiento. La deuda china corporativa pasó a representar un 158% del PBI, un incremento de más del 50% desde 2008. Una parte importante de esa deuda corresponde a empresas estatales, perfectamente podríamos decir que se trata de una deuda pública disfrazada. La deuda pública oficial representa el 46% del PBI y la deuda hogareña el 42%.

Para Khoon Goh, director de ANZ, las empresas deberán “regresar a los bancos chinos para obtener préstamos, lo que significa que los bancos quedarán más expuestos”.

Para los analistas, algunos de los sectores más afectados por la nueva situación, serán las empresas aéreas y las navieras. Un sector vital en el desenvolvimiento de la economía china.

La vinculación de las empresas de transporte internacional con la deuda china es que la mayoría de ellas financian sus aviones y buques, además de los gastos de capital contrayendo deuda. Un estudio indica que cada incremento porcentual de la deuda puede reducir el beneficio de las compañías aéreas en 5 a 9% y en las navieras entre un 15 y un 30%.

Las compañías se preparan

El gobierno ha rechazado la calificación de Moody’s y la tildó de infundada. Sin embargo, las compañías de transporte han estado preparándose para esta situación, reduciendo su exposición a un endeudamiento en dólares y tomando deuda en yuanes.

Las empresas que operan con aviones y buques a través del sistema de leasing saben que las empresas a cargo trasladarán los mayores costos de financiación a las compañías navieras y las aerolíneas.

Algunas compañías como Hainan Airlines planean adquirir 19 aviones nuevos a la firma Boeing, mediante la venta de bonos de deuda convertibles por unos 15.000 millones de yuanes.

Otras empresas, aún antes de la decisión de Moody’s, ya habían iniciado fuertes planes de ajustes. Tal es el caso del conglomerado LeEco que planea despedir 300 empleados en Estados Unidos.

Las perspectivas

S&P Global Ratings ya había dado su veredicto negativo sobre la deuda china en enero de este año y al ser consultados sobre la actual situación reafirmó lo que venía sosteniendo desde principios de año.

Para los observadores es poco probable que la deuda china implique el ingreso de ese país a una crisis similar a la que vivieron los países asiáticos en 1997. No obstante, se espera que el gobierno de Xi Jinping adopte las medidas y reformas necesarias para reducir los niveles de apalancamiento, aun a riesgo de desacelerar aún más la economía.