George Soros no es sólo un hombre de las finanzas, sus opiniones sobre el mundo globalizado marcan siempre tendencias y son materia de análisis, casi podríamos decir que hay una corriente del pensamiento asociada a este hombre. En un artículo publicado en el portal Project Syndicate, hizo referencia al Brexit, sus consecuencias y las posibilidades de llegar a un punto de reversión. Para George Soros, lo que tenga que decir la gente es muy importante en el futuro de las relaciones entre el país británico y la Unión Europea.

El Brexit en un punto de inflexión

El hombre fuerte del Foro de Davos no tiene por costumbre decir las cosas con eufemismos o de manera metafórica y para él, el Brexit es una propuesta perdedora de la cual salen perjudicados el Reino Unido y la Unión Europea. En una clara referencia a los últimos resultados electorales, Soros sostuvo que el Brexit no se puede deshacer, pero es claro que la gente está cambiando de opinión.

George Soros ha señalado que la economía del Reino Unido se acerca a un punto de inflexión, la característica fundamental de los desarrollos económicos insostenibles.

Recordemos que luego del Brexit, la economía británica dio señales de fortaleza, pero a medida que se iba acercando el plazo de hacer realidad lo dispuesto por el referéndum, comenzaron las señales de debilidad, el consumo se hace cada vez más débil y la libra pierde terrenos frente a otras monedas.

El inicio formal de las negociaciones para la separación del Reino Unido de la Unión Europea, coincidieron con la derrota electoral de Theresa May y su partido conservador y ahora, el plan a llevarse adelante está con más dudas que certezas.

George Soros, el nuevo casamentero

El escenario es confuso. Hace algunos días, Mark Carney, gobernador del Banco de Inglaterra dijo que las perspectivas de inflación hogareña aún son moderadas por lo que no existe ningún apuro en modificar las tasas de interés. Sus palabras golpearon en la línea de flotación de la libra esterlina y ésta sufrió una nueva caída.

Para George Soros, los hogares británicos verán caer sus condiciones de vida durante el proceso de separación, entre otras cosas porque el Banco de Inglaterra deberá, forzosamente, aumentar los tipos de interés y esto dificultará el pago de la deuda hogareña.

El financista sostiene que la separación total entre el Reino Unido y la Unión Europea llevará unos cinco años, en ese tiempo se celebrarán muchas elecciones y la gente puede cambiar de opinión. “Si todo saliese bien, puede que las dos partes quieran volver a casarse, incluso antes que se hayan divorciado”.