Este martes 6 de noviembre los ciudadanos de Estados Unidos volverán a las urnas. Han transcurrido dos años desde el sorprendente triunfo de Donald Trump. Esta vez, será el turno de renovar de manera parcial los miembros de la Cámara de Representantes y del Senado. Se espera un nivel de participación récord para unas elecciones de medio término. Demócratas y republicanos disputarán sus aspiraciones marcados por la hoja de ruta del presidente que ha logrado fuertes divisiones entre los que lo apoyan y los que lo rechazan. Los resultados podrían tener una influencia decisiva en medio de un convulsionado escenario internacional. Los temas de inmigración y la guerra comercial con China han sido el gran eje de la campaña.

Las elecciones de medio término que proyectan hacia el futuro

Para algunos, las elecciones de medio término de este martes en Estados Unidos serán las más costosas de los últimos años. Se espera que la participación de los ciudadanos sea récord para este tipo de comicios. Con un promedio histórico de participación del 40%, este martes podría llegar al 46% ¿los motivos? Las pasiones que despierta Donald Trump. A favor y en contra.

Los panoramas son distintos en cuanto a las expectativas en ambas cámaras del Congreso. Luego del martes, los demócratas podrían hacerse con el control de la Cámara de Representantes. Mientras que el Senado permanecería en manos de los republicanos. Esto debido a que los demócratas ponen en juego 28 bancas, mientras que los republicanos solo 6.

Sin embargo, las elecciones de medio término podrían condicionar los dos últimos años del primer período de Donald Trump. Los candidatos de Partido Demócrata se han comprometido ante sus electores a ponerle un freno a la hoja de ruta del actual presidente.

Los candidatos oficialistas tratan de convencer a los electores con el argumento de que ya han comenzado a verse los resultados del “America First”.

La economía al debate

Aunque no lo hacen de manera directa, los republicanos ponen sobre la mesa las bondades del período económico. Estados Unidos exhibe una tasa de desempleo históricamente baja, con un 3,7% de desocupados. Los salarios han crecido un 3,1% en términos anuales.

Sin embargo, para los analistas, la relación entre el desempleo y el crecimiento de los ingresos sigue siendo débil. Una manifestación de que el crecimiento del empleo, luego de la crisis de 2008, muestra signos de precariedad y los temores de los empresarios.

Por otro lado, la política monetaria de la Reserva Federal ha dividido las opiniones. Para algunos, la hoja de ruta de Jerome Powell acerca a la economía norteamericana a las puertas de una nueva recesión. Nuevos aumentos en la tasa de referencia es una mala combinación en un escenario donde el crecimiento global encuentra sus límites.

La fragilidad de los datos económicos se puede observar en las dos fuertes caídas que han sufrido en el año los mercados bursátiles de Estados Unidos.

Inmigración y guerra comercial

La política inmigratoria y la guerra comercial con China tendrán peso propio en las elecciones de medio término. Estos temas dividen no solo al electorado sino también a los empresarios.

La expulsión masiva de inmigrantes pone nerviosos a los empresarios que ven las dificultades en reclutar mano de obra, encareciendo el valor de la hora de trabajo. Esta política ha afectado a las industrias. Desde la construcción hasta Silicon Valley.

Los aranceles establecidos a las importaciones chinas no están actuando como impulsores de la industria nacional de Estados Unidos. Por el contrario, un sector de la industria sufre el incremento de insumos y materiales que elevan el costo de fabricación.

Algunos senadores republicanos están recibiendo las críticas de los empresarios radicados en sus estados. Han visto cómo sus exportaciones ha China han sufrido un freno debido a las represalias del país asiático.

Como hacía mucho tiempo que no se veía, las elecciones de medio término en Estados Unidos están dividiendo las aguas fuertemente.

Los sondeos antes del martes

Los demócratas han poblado sus listas de mujeres, en momentos que la problemática de género irrumpe con fuerza en casi todo el mundo. El partido de Barack Obama líder ampliamente los sondeos entre las mujeres. 55% a 37%.

Las encuestas muestran que Donald Trump pierde fuerza en las grandes ciudades, mientras conserva su popularidad entre el electorado rural. Así, las encuestas muestran que un 44% del electorado aprueba la gestión actual de la Casa Blanca. Un 52% se ha manifestado en contra.

Lo que sí está claro es que los resultados de las elecciones de medio término marcarán un punto de inflexión en la política de Estados Unidos y en el resto del mundo.