La gran explosión que ha significado 2017 en el mundo de las criptomonedas ha abierto un gran campo de acción para los hackers que ya han robado el 14% del volumen total de monedas virtuales. Las operaciones en bitcoin y en ether son las más agredidas, junto con la contabilidad descentralizada o blockchain, la tecnología que soporta a la mayoría de las criptomonedas. Con este crecimiento del delito hacia las monedas virtuales, crece el negocio de las soluciones en materia de seguridad informática.

Las criptomonedas bajo ataque

El crecimiento exponencial en el precio del bitcoin y de la mayoría de las monedas virtuales que hoy existen en el mercado, han abierto un gran campo de acción para los hackers que han desarrollado sofisticados sistemas de ataque, tanto a las operaciones en criptomonedas como a la tecnología utilizada para la validación de las operaciones.

Según un reciente informe de Autonomous Research LLP, en menos de una década, los hackers ya han robado más de 1.200 millones de dólares en bitcoin y en ether, las dos principales monedas del mundo de criptoactivos.

El robo de monedas virtuales, por parte de los hackers, se ha convertido en un “negocio” de más de 200 millones de dólares anuales. Un 14% del volumen total de bitcoin y ether han pasado a manos de los piratas informáticos, por medio de operaciones delictivas.

Además, un cálculo realizado por especialistas señala que los robos de criptomonedas han significado un costo adicional de 11,3 mil millones de dólares a gobiernos y empresas por ingresos tributarios no percibidos y transacciones ilegales.

Causas y consecuencias de los ciberataques

La vulnerabilidad de las operaciones en monedas virtuales se ha hecho más visible a medida que la euforia de los inversores va creciendo. Muchos de estos inversores, en el ánimo de ingresar rápidamente al enorme negocio de las criptomonedas, no reparan en los aspectos de seguridad digital, en el caso de los monederos.

Por otro lado, la enorme proliferación de emprendimientos para el desarrollo de nuevas monedas digitales provoca que la mayoría de las compañías de seguridad informática siempre estén por detrás de los acontecimientos. Las ofertas iniciales de monedas (ICO) han sido blanco fácil para los hackers.

Los hackers están a la vanguardia de perfeccionamiento de las técnicas de ataque. Violar las cadenas de bloques es muy difícil, pero muchos de los piratas han logrado retrasar el proceso de validación y de esta forma, han logrado realizar más de una operación con las mismas monedas.

Las empresas de seguridad informática se preparan

El crecimiento de los ataques a las operaciones de criptomonedas ha generado, su vez, un conjunto de oportunidades para las compañías encargadas de desarrollar sistemas de seguridad informática.

El grupo de seguridad Cisco Talos descubrió, recientemente, un agujero de vulnerabilidad en clientes de Ethereum. Este error sistémico podría conducir a una filtración de datos confidenciales y afectar las cuentas. También reportaron un fallo de seguridad en el monedero conocido como Parity que, en noviembre pasado, provocó la pérdida de 155 millones de dólares.

La casa de intercambios Youbit, con sede en Corea del Sur, anunció su quiebra luego que en diciembre fuera víctima de un ataque de hackers y perdiera el 17% de sus activos.

Ni la minería bitcoin está salvo de los ataques de piratas informáticos. En diciembre de 2017, la firma de minería NiceHash, reportó un robo de su billetera virtual por 63 millones de dólares en bitcoins.

Los analistas especulan que el mercado de software, hardware y servicios vinculados con seguridad informática para operaciones en criptomonedas alcanzará la cifra de 335 mil millones de dólares.

Negocios que florecen con la inseguridad informática.