Luego de tres días, el cierre del gobierno federal llegó a su fin. Un precario acuerdo entre los senadores republicanos y demócratas permitió la aprobación de un financiamiento provisorio del gobierno federal hasta el próximo 8 de febrero. El acuerdo incluye comenzar el debate sobre la inmigración y el financiamiento de los “dreamers” tras el cierre del programa por parte de Trump, en septiembre de 2017.

El cierre del gobierno impone el debate sobre inmigración

Con el primer minuto del sábado comenzó el cierre del gobierno federal de los Estados Unidos. La falta de aprobación del presupuesto federal tuvo como consecuencia el cierre (provisorio) de cientos de dependencias federales, entre ellas importantes agencias, y sus trabajadores dejarán de percibir los salarios por los días que dure el cierre.

El punto que ha paralizado la aprobación del presupuesto federal está vinculado a que os senadores demócratas – y algunos republicanos – quieren que la ley de financiamiento incluya un conjunto de gastos obligatorios para financiar el programa conocido como DACA que da protección a los niños y jóvenes indocumentados, llamados “dreamers”. En los Estados Unidos, el DACA tiene registrados a cerca de 700 mil personas.

Cuando Donald Trump, en septiembre de 2017, puso fin al programa dijo que era el Congreso de los Estados Unidos y el presupuesto que éste apruebe quien debería dar protección a estos jóvenes inmigrantes. Ahora los demócratas exigen un debate claro al respecto.

Debate sin avances

Durante el fin de semana se sucedieron las reuniones bipartidistas para destrabar la situación de cierre del gobierno federal. El senador por Kentucky, Mitch McConnell, líder de la mayoría, ha señalado que tiene la “intención” de abrir un debate sobre la inmigración. Desde el lado de los demócratas consideran que la promesa es insuficiente y poco clara. Algunos senadores republicanos moderados, también reprochan una falta de énfasis a sus propios lideres para allanar el camino a una solución.

Lisa Murkowski, senadora republicana por Alaska y miembro del ala moderada ha dicho que existe “un reconocimiento sobre la importancia del debate sobre inmigraciones y que es mejor que se dé antes que después”.

Así transcurrió, sin avances de importancia, el fin de semana y comenzaba el cierre de oficinas y agencias federales.

El lunes trajo acuerdos

Este lunes, los senadores republicanos y federales llegaron a un acuerdo que incluye un financiamiento provisorio del gobierno hasta el 8 de febrero y de esta manera, poner fin al cierre del gobierno a partir del martes. Para arribar a este compromiso, que algunos demócratas consideran insuficiente, el Senado de los Estados Unidos deberá abocarse a discutir un plan de gastos que implique la protección de los “dreamers”.

“Me complace que demócratas y republicanos en el Congreso hayan recuperado el sentido”. Esas fueron las palabras con que Donald Trump saludó el acuerdo que permite poner fin al cierre del gobierno. Al cierre de esta edición, el Senado se aprestaba a votar el financiamiento provisorio para que luego sea puesto a votación en la Cámara de Representantes, antes de ser firmado por el presidente.

Chuck Shumer, senador por New York y uno de los líderes demócratas, dejó en claro que ahora el balón está en el campo de los republicanos y les recordó que “ahora tienen 17 días para evitar que los ‘dreamers’ sean deportados”.

Los mercados reaccionan

Con el cierre del gobierno, los mercados financieros reaccionaron con cautela. El dólar se debilitó frente a las principales monedas. Los futuros de acciones se movieron en direcciones dispares y el rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años sufrió una leve baja.

Al conocerse el acuerdo alcanzado por republicanos y demócratas, en la tarde del lunes, los mercados respiraron aliviados ante el fin del cierre del gobierno. El dólar repuntó, los futuros de acciones acumularon ganancias. El S&P 500 subió un 0,69% y el Dow Jones Industrial Average un 0,55%.

Ahora, el centro del debate se traslada al debate sobre la forma que adquirirá la protección a los inmigrantes y hay promesa de duras batallas al respecto.