Como no podía ser de otra manera, los ojos del mundo financiero estuvieron puestos en lo que sucedía en la jornada del lunes con el debut del bitcoin en Wall Street, como activo subyacente de contratos a futuro. Los instrumentos financieros basados en la cotización de la criptomoneda fueron lanzados por la firma Cboe Global Markets Inc. y la euforia se apoderó de los mercados. Sin embargo, también las dudas y reservas fueron parte del espectacular debut del bitcoin en Wall Street.

Los futuros de bitcoin debutan con éxito

El bitcoin hizo su ingreso al “Salón de la Fama” de los grandes mercados financieros de la mano de Cboe Global Markets y fue con éxito. La cotización a enero de los contratos a futuro alcanzó una suba del 24% y dos veces debieron activarse las paradas comerciales que habían sido previamente determinadas si la criptomoneda se elevaba demasiado.

Esto mismo abrió toda una serie de dudas entre los inversores sobre si los futuros de bitcoin no estaban repitiendo la misma senda especulativa de su activo subyacente. Cuando todos esperaban que este instrumento financiero acortara las distancias entre la cotización del bitcoin y los contratos, la realidad es que los compradores elevaron un 13% su precio con respecto al activo subyacente.

Para algunos analistas, la explicación sobre el alza del precio en los contratos a futuros es bastante sencilla y se debe a que muchos inversores han encontrado la oportunidad de vincularse al mercado de las monedas virtuales sin mantener una relación directa con los bitcoins reales, que para algunos sigue siendo peligrosa.

Visiones bifurcadas

Los nuevos instrumentos financieros lanzados por Cboe son solo el inicio de un proceso que aún espera por nuevos jugadores. Para la semana siguiente están previstos los lanzamientos de futuros de bitcoin de CME y Nasdaq Inc.

Aunque los inversores han esperado escenarios de volatilidad para distintos tipos de activos, el bitcoin puede ser propietario de una volatilidad más allá de lo esperado. Las dudas están puestas en si los inversores puedan cumplir con los contratos, una vez que estos caduquen, si los precios de la moneda se disparan.

Las opiniones están divididas, mientras algunos esperan que la evolución del comercio de contratos a futuro colabore haciendo del mercado del bitcoin más regulado y estable, otros consideran que existe una brecha importante entre el activo subyacente y los contratos, ya que, a la finalización de los mismos, los inversores recibirán dinero en efectivo y no bitcoins.

Para la firma de abogados de fondos de cobertura, Stephen Kleinberg, Kaplan, Wolff & Cohen, el debut del bitcoin en Wall Street como activo subyacente de contratos a futuro, hallan el camino para que la SEC autorice un fondo negociado en bolsa basado en bitcoin.

En el lado opuesto de la línea, desde Clearbrook Global Advisor, sostienen que la criptomoneda posee una valoración sin ninguna base, sin activos que la respalden y carente de un crédito de respaldo por parte de algún banco central.

Mientras se negociaban los contratos a futuro, el bitcoin elevó su cotización un 9,6% y alcanzó los 17.148 dólares, 17 veces más arriba que al comienzo del año.