El presidente norteamericano, Donald Trump, puso fin a una semana de optimismo que reinó en los mercados financieros. Los inversores que confiaban en los avances de las negociaciones entre Estados Unidos y China recibieron un golpe este viernes. El presidente norteamericano, Donald Trump, le bajó las expectativas a la retracción de aranceles que envuelven a la guerra comercial entre ambos países. Cuando todo parecía encaminado, Trump sostuvo que él “no ha acordado nada aún”. El impacto de las declaraciones se sintió en los mercados. Las acciones bajaron y los bonos del Tesoro volvieron a recibir a los inversores confundidos.

De la guerra comercial a la guerra de mensajes

“A ellos les gustaría que tengamos una reversión (de los aranceles), yo no he aceptado nada”. Con estas palabras, Donald Trump sembró dudas respecto a los avances reales en la primera fase del acuerdo para superar la guerra comercial.

Anteriormente, los negociadores de Estados Unidos y China habían destacado los acuerdos para la fase uno. Los mercados iniciaban una semana llena de optimismo, ante los avances.

De acuerdo con los voceros, Estados Unidos y China habían avanzado sobre los puntos de un acuerdo en etapas. China había solicitado que los acuerdos incluyeran una reversión de los aranceles impuestos por EE. UU. en esta guerra comercial.

Gao Feng, del Ministerio de Comercio chino, sostuvo que los responsables de las negociaciones de ambos países habían avanzado. La primera fase del acuerdo, según el portavoz del ministerio, incluía una revisión de los aranceles adicionales. En principio se hablaba de eliminar las tarifas que comenzaron a regir en septiembre de este año.

El propio Larry Kudlow había dicho que la fase uno del acuerdo para superar la guerra comercial incluía una revisión de los aranceles.

Luego de las declaraciones de Trump, los mercados operaron con cautela. Las acciones en Wall Street se movieron en baja para recuperarse al final de la jornada. El dólar perdió terreno frente al yen japonés y los bonos del Tesoro vieron retroceder su rendimiento.

Disparen contra la prensa

La guerra comercial tiene en Peter Navarro, a una de sus espadas más fuertes. El asesor comercial de la Casa Blanca se manifestó en un correo electrónico, contra los periodistas. Los acusó de ser “propagandistas en favor de China”. Los responsabiliza por afirmar de manera “falsa” que se había alcanzado un acuerdo respecto a los aranceles.

En esta guerra comercial, Estados Unidos ya impuso aranceles a 500 millones de dólares en productos chinos. En septiembre, con nuevos aranceles vigentes, EE. UU. logró reducir el déficit de la balanza comercial con China. Pero, el costo ha sido elevado para la economía y la política norteamericanas.

La guerra de aranceles ha significado la caída, también, de las exportaciones de EE. UU. a China. Uno de los sectores más perjudicados es el agrícola.

En esta fase uno del acuerdo, EE. UU. espera un aumento significativo, por parte de China, de productos agrícolas. También un mayor acceso a los mercados financieros del país asiático. Temas como la transferencia obligatoria de tecnología y las normas de seguridad cibernética, serán abordados en próximas fases.

Las palabras de Donald Trump colocan, nuevamente, a la guerra comercial en un terreno de incertidumbre. Los mercados tendrán un comienzo de semana difícil si no se despejan rumores.