El primer trimestre del año no va a ser el mejor recordado por los directivos de Coca-Cola. El gigante de las bebidas gaseosas mostró una caída del 20% en sus ganancias. El resultado coincide con el alejamiento de su actual CEO, Muhtar Kent y su reemplazo por James Quincey. La intención es continuar con un fuerte plan de reorganización de las operaciones de Coca-Cola para mejorar los resultados de la compañía. Se prevé la continuidad en la política de abandono de las operaciones de embotellamiento.
Los planes inmediatos de Coca-Cola
En lo inmediato, la compañía con base en Atlanta, pretende una reducción anual de costos del orden de los 800 millones de dólares, en lo que significa un plan más ambicioso de achique de los costos de 3 mil millones de dólares.
El plan incluye 1.200 puestos de trabajo menos para 2018 y un agresivo plan para abandonar las plantas de embotellado que tiene dispersas alrededor del mundo. Se trata de uno de los planes de reorganización de las operaciones más audaz que ha llevado adelante Coca-Cola.
El momento no puede ser más oportuno ya que los informes de ganancias del primer trimestre del año mostraron una caída del 20%. Cada acción de Coca-Cola tuvo una ganancia de 43 centavos de dólar contra los 44 que preveían los analistas. Una disminución en los volúmenes de venta de bebidas que significaron una baja de los ingresos del 11% y las fluctuaciones monetarias fueron las principales causas que estrangularon los resultados.
A pesar de los resultados, no se espera que el valor de las acciones se vea demasiado afectado. De hecho, las predicciones indican una disminución de las ganancias por acción para el próximo ejercicio de entre el 1 y 3%. Las estimaciones anteriores ubicaban esta disminución en el 4%.
Las perspectivas a futuro
Dentro de los objetivos, Coca-Cola se propone desarrollar e incorporar nuevas bebidas sin cola. El cambio de comportamiento de los consumidores obliga, tanto a Coca-Cola como a PepsiCo., a reorientar sus negocios. El consumo de bebidas gaseosas entre la población mostró su nivel más bajo en 31 años.
Ahora la empresa fundada por John Pemberton contará con un Director General de Crecimiento y un Jefe de Innovación que reportarán de manera directa a James Quincey, quien asumirá el próximo 1° de mayo.
La intención de Coca-Cola es fijar su atención en los beneficios y no tanto en los volúmenes de producción. Por ello, se espera el desarrollo de productos con menor contenido, donde la rentabilidad es mayor.
La próxima semana cuando su histórico CEO, Muhtar Kent, traspase el mando de las operaciones de Coca-Cola a James Quincey, comenzará a escribirse una nueva página en la historia de uno de los emblemas de marcas exitosas. Aunque, al decir de Quincey, “Que el futuro sea más grande que nuestro pasado, para que la compañía sea más grande que la marca”.
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