En la jornada del lunes, los rendimientos de los bonos a largo plazo del gobierno de los Estados Unidos cayeron a niveles mínimos, desde el inicio del año. Los inversores buscaron refugio en los bonos del gobierno ante una nueva caída en las órdenes de pedidos de bienes durables. Existe un marcado signo de escepticismo entre los inversores y cada vez más, se profundizan las dudas respecto al futuro del plan monetario de la Reserva Federal.

Los bonos del gobierno, un refugio seguro

El indicador marcó que los pedidos de bienes durables – productos diseñados para tener una vida útil de, al menos, tres años – cayeron un 1,1%. Esto constituyó todo un disparador para que las dudas de los inversores se hicieran más grandes respecto a si habrá una nueva suba de tasas de interés por parte de la FED.

El rendimiento de los bonos a 10 años, este lunes se ubicó en 2,135% contra los 2,146% que había sido el cierre del viernes. El rendimiento del día lunes fue el más bajo desde el 10 de noviembre de 2016.

Aún mejor fue el comportamiento de los bonos del gobierno a 30 años. El rendimiento fue de 2,696%. El cierre más bajo dese el 8 de noviembre de 2016.

Para Thomas Roth, director ejecutivo de MUFG Securities Americas Inc., los datos económicos son decepcionantes y los inversores dudan cada vez más de un nuevo aumento de tasas por parte de la Reserva Federal.

El rendimiento de los bonos del gobierno y el escepticismo

Desde diciembre del año anterior, la Reserva Federal ha elevado las tasas de interés en tres oportunidades, pero esto no ha evitado la caída de los rendimientos. Para los analistas, la capacidad de la FED de influir en el precio de los bonos del gobierno es cada vez menor.

Un conjunto de factores se ha combinado para que los rendimientos de los bonos del gobierno se muestren a la baja: hay una profunda desconfianza en la capacidad del gobierno de Donald Trump para impulsar la prometida agenda fiscal. Existen dudas sobre la expansión de la economía norteamericana, luego de los tres primeros meses del año. Y, por sobre todas las cosas, la desaceleración de la inflación en un cuadro de un marcado laboral muy ajustado que se acerca al pleno empleo.

El lunes estuvo marcado por una venta de 26 mil millones de dólares de bonos del gobierno a dos años. Para este martes está prevista una venta de 34 mil millones de bonos a cinco años y el miércoles habrá una venta de 28 mil millones a siete años.

El plan de la FED ya no convence

Estos números son el reflejo del escepticismo de los inversores a que la Reserva Federal pueda continuar con su plan de alzas de tasas, considerando que la desaceleración de la inflación es un fenómeno episódico.

El índice del Bank of America Merrill Lynch que mide las expectativas de los inversores en las oscilaciones de los precios de los bonos del gobierno se ubicó en el nivel más bajo desde el 9 de mayo de 2013.

Con una inflación contenida, la caída de las órdenes de bienes durables y una Reserva Federal que quiere comenzar con el proceso de arreglar su balance, los inversores descreen de la continuidad del plan de alza de tasas y buscan refugio en los bonos del gobierno.