Las aplicaciones móviles se abren camino con fuerza en el mundo de la virtualidad y se han transformado en indispensables para mejorar la experiencia de los clientes. Así parecen entenderlo las principales firmas financieras de Wall Street. Entidades como Goldman Sachs o Wells Fargo ofrecen una experiencia inédita a sus clientes a partir de sus aplicaciones móviles. Con novedosas funciones, estos programas para dispositivos móviles eliminan aquellas suscripciones o servicios que no han sido utilizados por mucho tiempo. De esta manera, los bancos quieren colaborar en el orden de las finanzas de sus clientes.

Gastos domésticos bajo control con nuevas aplicaciones móviles

Las aplicaciones móviles son programas destinados cumplir funciones exclusivamente en dispositivos como smartphones y tablets. Las empresas que cuentan y ofrecen sus propias apps buscan mejorar las relaciones con sus clientes y ofrecer una experiencia de usuario única.

Los usuarios se adaptan de manera, cada vez, más natural a la descarga y uso de aplicaciones móviles. Como dato de seguridad, una app móvil debe ser descargada de las stores oficiales de los distintos sistemas operativos como Android o iOS de Apple.

En este camino de llevar la relación con sus clientes, banco como Wells Fargo, Goldman Sachs o Discover Financial Services, ofrecen aplicaciones móviles que tienen como novedad un mejor control de los gastos cotidianos.

Estas aplicaciones eliminan de manera automática si las configuramos de esa manera, aquellas suscripciones o servicios que llevan mucho tiempo sin uso. En un escalón mejor, buscan mejores precios o emiten una alerta cuando el precio ha aumentado.

De esta manera, las apps móviles pueden dar de baja tu servicio de Netflix si hace mucho tiempo que no lo utilizas. O la cuota del gimnasio si has decidido dedicarle más tiempo a la pereza física.

Un límite a los pagos recurrentes

En los tiempos que corren, los usuarios han perdido el rastro de las numerosas suscripciones que está pagando. Las alarmas se encienden cuando revisan el resumen de su cuenta bancaria y descubren la importante lista de gastos recurrentes que ya habían perdido de vista.

Tomando estas dificultades por las que atraviesan sus clientes, las entidades financieras ofrecen distintas alternativas para controlar esos gastos recurrentes.

En algunos casos, las aplicaciones móviles simplemente eliminan aquellas suscripciones o servicios que no se utilicen de manera permanente. En la batalla de los servicios de streaming, Netflix no está sola, ahora cohabitan Hulu, Disney+ y Amazon. Y un buen día, los usuarios se dan conque están suscriptos a todos estos servicios y algunos aparecen como desaprovechados.

Otras apps móviles, menos ambiciosas en su misión, ofrecen con regularidad un listado de gastos recurrentes para que el cliente tome la decisión de cuál abandonar.

Pero, lo concreto es que los bancos están demostrando un interés cada vez mayor por colaborar en que sus clientes tengan la casa en orden.

Los dispositivos móviles y sus aplicaciones constituyen una enorme fuente de comercio, entretenimiento, aprendizaje e información. Pero, ala vez son una suerte de drenaje por donde se escapa de manera silenciosa una parte del ahorro de los consumidores norteamericanos.