Los ETF de bonos son fondos cotizados en bolsa que poseen dos características que los hacen atractivos para los inversores. Se trata de fondos de inversión mancomunados con una cartera de inversión basada en activos de renta fija. Estos ETF de renta fija se pueden comprar y vender en el mercado secundario de acciones.
Por la naturaleza de su cartera, los ETF de bonos son inversiones más o menos conservadoras y con una exposición al riesgo baja. Ofrecen a los inversores la posibilidad de participar del mercado de renta fija sin tener que comprar bonos de manera individual.
Además, debido a su gestión pasiva, estos fondos cotizados en bolsa involucran costos de administración relativamente bajos. Son instrumentos financieros ideales para diversificar y equilibrar un portafolios de inversión.
Analizaremos las ventajas y desventajas de invertir en ETF de renta fija. Conoceremos los diferentes tipos de fondos cotizados en bolsa basados en bonos que podemos encontrar en el mercado. Por otro lado, compraremos a estos instrumentos con otros similares para que pueda tomar su decisión con mayores elementos de análisis.
¿Qué son los ETF de bonos?
El mercado de activos de renta fija es ideal para aquellos que buscan cierta seguridad en sus inversiones, limitando la exposición al riesgo. Esto implica invertir en bonos o títulos de deuda del gobierno o corporativos en el mercado primario o secundario. Sin embargo, los ETF de bonos ofrecen la posibilidad de participar del mercado de renta fija con una cartera de bonos administrada de manera profesional. Las posibilidades de una mayor rentabilidad son importantes.
Por otro lado, los fondos cotizados en bolsa se pueden comprar y vender en la bolsa de valores. Esto, le brinda al inversor la posibilidad de entrar y salir de este mercado cuando lo desee. De acuerdo con su estrategia de inversión.
Coincidiendo con los analistas de mercados, los ETF de bonos poseen una mayor liquidez que sus parientes cercanos los fondos mutuos, inclusive mayor a los bonos individuales.
Los ETF de renta fija gozan de una alta consideración entre los inversores individuales e institucionales. En 2020, el volumen de operaciones con ETF de bonos, solo en EE. UU., fue de casi 170 mil millones de dólares. A nivel global, este tipo de activos bajo administración, en 2020 fue de 1,4 billones de dólares.
Los inversores en ETF de bonos reciben, en forma mensual, el pago de dividendos generados por los intereses de los títulos de deuda bajo gestión. Además, anualmente, un dividendo que es resultado de las ganancias de capital obtenidas.
Tipos de ETF de renta fija que podemos encontrar en los mercados
Los activos de renta fija pueden dividirse en bonos o títulos de deuda emitidos por los gobiernos o por las corporaciones. Estos títulos se emiten con el objetivo de reunir capital con diferentes fines. Expandir las operaciones, financiar planes de obras públicas, ampliar la producción, etcétera. Lo que importa considerar es la calidad crediticia del emisor.
Los bonos del Tesoro se encuentran entre los activos de mayor consideración. Sin embargo, los fondos de inversión, responsables de los ETF de bonos, pueden constituir carteras con diferentes clases de bonos. Los inversores pueden acceder a toda la información de los activos bajo gestión de un fondo en tiempo real.
Existen carteras más y menos riesgosas. Algunas se conforman exclusivamente con títulos del gobierno. Otros, eligen los bonos corporativos. También, están los fondos que invierten en títulos de baja calificación. Poseen un elevado pago de intereses a los tenedores con la desventaja de un riesgo elevado de incumplimiento. El caso típico son los títulos de deuda de países emergentes.
Aquí, les mostramos un breve listado de ETF de bonos más comunes que se pueden encontrar en el mercado.
- ETF de bonos del Tesoro de EE. UU.
- Fondos cotizados en bolsa de bonos corporativos.
- ETF de bonos basura o de muy baja calificación crediticia.
- Fondos cotizados de bonos convertibles.
- Fondos basados en bonos apalancados.
- ETF basados en títulos de deuda internacionales (corporativos o gubernamentales).
- Fondos de bonos de tasa flotante.
Los administradores de fondos cotizados en bolsa pueden invertir en un tipo específico de bono o armar una cartera combinada. En esta última alternativa, se busca equilibrar activos de mayor riesgo y elevada rentabilidad con otros más conservadores.
Las ventajas y desventajas de invertir en ETF de bonos
Para los inversores, los ETF de bonos ofrecen ventajas que deben ser consideradas para una adecuada estrategia de inversión. Un ETF de renta fija ofrece la misma posibilidad de recibir dividendos mensuales por interesas, al igual que una cartera propia de bonos. A esto, debemos sumarle el aliciente que la cartera está administrada de forma profesional.
Si usted posee solo un tipo de bono o títulos de deuda, lo más probable es que reciba sus pagos de intereses de manera semestral. La cartera de ETF está armada para que los inversores, como dijimos, reciban dividendos mensuales en concepto de intereses.
A diferencia de los bonos individuales, usted no deberá preocuparse por los vencimientos de los activos. Las carteras de ETF de bonos renuevan periódicamente sus activos bajo gestión. Esto asegura a los inversores el flujo constante de efectivo.
Desprenderse de sus acciones de un fondo cotizado en bolsa basado en bonos no es complicado. La mayoría de estos ETF poseen una buena liquidez en el mercado secundario. Sin embargo, los administradores realizan muestreos permanentes para evaluar la liquidez del momento.
Como desventaja señalemos que los ETF de bonos están expuestos al riesgo de los cambios de tasa de interés. Por lo general, las inversiones en activos de renta fija son bastante seguras, incluidos los ETF, pero se mueven en una correlación negativa con otros mercados. Cuando los bonos suben, las acciones bajan.
ETF de renta fija y fondos mutuos de bonos
Estos dos instrumentos financieros son bastante similares. Pero, sus diferencias pueden inclinar la balanza a la hora de la elección.
Los ETF de bonos se negocian en el mercado de valores durante toda la jornada bursátil. El precio de las acciones del fondo varía de acuerdo con los cambios en las cotizaciones de sus activos bajo administración y la oferta y demanda de las acciones.
En cambio, un fondo mutuo de bonos deberá aguardar hasta la finalización de la jornada para establecer su Valor Liquidativo (NAV). Comprar y vender participaciones de estos fondos mutuos es a través de su administración. Esto no siempre es tan sencillo.
Por otro lado, los fondos mutuos poseen una gestión activa, en su mayoría, esto los coloca un escalón más arriba de los ETF en cuanto a costos y tarifas.
La decisión de invertir en ETF de renta fija tiene que estar en sintonía con su estrategia de inversión. Pregúntese cuáles son sus objetivos de rentabilidad. Qué tolerancia al riesgo está dispuesto a asumir. Cuánto sabe y cuánto desconoce de estos instrumentos financieros. Todas las respuestas a estas preguntas lo llevarán a una decisión más acertada. Si tiene dudas, consulte a un asesor financiero profesional.
En las próximas entregas de Club de Capitales continuaremos analizando el mercado de los fondos cotizados en bolsa (ETF). Lo invitamos a suscribirse a nuestro newsletter. Reciba en su casilla de correos la mejor información de los mercados y acceda a una importante biblioteca de artículos educativos. Recuerde dejarnos sus comentarios, sugerencias, consultas y opiniones.
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